jueves, 12 de diciembre de 2013

PARA LOS LÍDERES DE LA "OPOSICIÓN" CUBANA QUE SE NIEGAN A TRABAJAR POR UN LEVANTAMIENTO POPULAR Y QUE TANTO DICEN ADMIRAR A MANDELA-II:
(12-12-13-1:10PM)
“Hay cuatro formas de violencia posible. Hay sabotaje, hay guerrilla, hay terrorismo, y hay revolución. Decidimos adoptar el primer método de escape y que antes de tomar cualquier otra decisión.
A la luz de nuestro compromiso político de fondo, la elección era lógica. El sabotaje no implica la pérdida de vidas, y ofrece la mejor esperanza para las futuras relaciones raciales. La amargura se limitará al mínimo y, si la política ha dado sus frutos, el gobierno democrático podría convertirse en una realidad. Esto es lo que sentí en ese momento, y esto es lo que dijimos en nuestro Manifiesto.
Esperábamos que no fuera demasiado tarde, de modo que tanto el Gobierno y sus políticas pudieran ser cambiadas antes de que las cosas llegaran a la desesperada situación de guerra civil.
El plan inicial se basaba en un análisis cuidadoso de la situación política y económica de nuestro país. Creímos que Sudáfrica dependía en gran medida de capital extranjero y el comercio exterior. Pensamos que la destrucción planificada de plantas de energía, y la interferencia con el ferrocarril y las comunicaciones telefónicas, que tienden a asustar a los capitales del país, hacen más difícil para las mercancías procedentes de las zonas industriales llegar a los puertos marítimos en los plazos previstos, y en el largo plazo ser una pesada carga para la vida económica del país.
Ataques a la cadena de la vida económica del país vinculado con el Gobierno, sabotaje en los edificios y otros símbolos del apartheid. Estos ataques podrían servir como fuente de inspiración para nuestro pueblo. Además, sería una salida para aquellas personas que se instaba a la adopción de métodos violentos y nos permitiría dar pruebas concretas a nuestros seguidores que habían adoptado una línea más atrás y estaban luchando contra la violencia del Gobierno.
Además, si la acción de masas, se lleva a cabo, y las represalias tomadas contra de las masas, pensamos que la simpatía por nuestra causa se despertaría en otros países, y que sería mayor la presión ejercida sobre el Gobierno de Sudáfrica.
Este era el plan de  Umkhonto  para llevar a cabo el sabotaje, y se les dio instrucciones estrictas a sus miembros desde el principio, que en ningún caso se  hiera o mate a la gente en la planificación o ejecución de las operaciones. Estas instrucciones se han mencionado en las pruebas de Mr. X.
Los asuntos de Umkhonto fueron controlados y dirigidos por un Consejo Nacional de Alto Mando, que tiene facultades de cooptación y de lo que podría hacer, y lo hizo, nombrar los comandos regionales. El Alto Mando es el órgano que determina los objetivos y las tácticas y estuvo a cargo de la formación y financiación. En el alto mando había Comandos Regionales que se encargaban  de la dirección de los grupos locales de sabotaje. En el marco de la política establecida por el Consejo Nacional de Alto Mando, los comandos regionales tenían autoridad para seleccionar los objetivos a ser atacados. No tenían autoridad para ir más allá del marco y por lo tanto no tenían autoridad para iniciar actos que ponen en peligro la vida, o que no encajan en el plan general de sabotaje.
Umkhonto tuvo su primera operación el 16 de diciembre de 1961, celebrada en Johannesburgo, Port Elizabeth y Durban, cuando los edificios de Gobierno fueron atacados. La selección de los objetivos es la prueba de la política a la que me he referido.” -Nelson Mandela ante el tribunal que lo condenó a largos años de prisión, en 1964)