“PELOTERO LA BOLA…” O EL RIDÍCULO APASIONADO DE CHÁVEZ

“PELOTERO LA BOLA…” O EL RIDÍCULO APASIONADO DE CHÁVEZ

(3-7-12-5:00PM) 

Por Andrés Pascual

Posiblemente, la única vez que la tiranía antillana se manifestó poco hermética con respecto a la salud del Carnicero de Birán, haya sido cuando contrajo bronconeumonía por la cantidad de basura que hablaba durante tanto tiempo: fue en 1959 por maratones interminables repletos de mentiras, de sin sentido y de obscenidades, que las decía por tubería diariamente y hasta entre 8-10 horas de duración. En 1960, 61, 62, bajó a entre 6-7, hasta hace unos días, cuando salió del ataúd y lo hizo para “intelectuales” por 9.

Entonces la revista que tanto contribuyó a canonizarlo desde la Sierra Maestra y durante los primeros 5-6 meses de 1959, Bohemia, publicó un material foto-reportaje de Luis Rolando Cabrera, en que se veía al dictador en una cama de hospital, explicando que “le habían recomendado lo imposible: reposo de voz…” y eso hizo, hace y hará durante toda su existencia, además de robar y matar, “hablar mierda y mentira na’má” sin poder contenerse, porque, a fin de cuentas, eso es lo único que ha contentado a un pueblo increíblemente arrastrado ante su opresor, prisionero de su propio desatino, por frases como “y ahora, para concluir, las sabias y orientadoras palabras de nuestro comandante en jefe…”, como lo presentaba aquel enano del civismo, comunista español de la peor ralea, Manolo Ortega

Como que en aquel momento de 1959 el pueblo, confundido aún una parte, o simpatizante de corazón porque harían realidad sus bajas pasiones legiones de falsos cubanos, desbordadas de un odio hasta aquellos momentos desconocido, le adoraba, pues manejaron por una semana, con la normalidad de cualquier país democrático, algo tan estúpidamente secreto después como “la salud del comandante en jefe”.

Ahora Chávez tiene cáncer y parece que no lo salvará ni “el médico chino” del cuento. ¡Que se joda, que sufra, que se revuelque en su mierda bolivariana!, a fin de cuentas, diariamente mueren miles de inocentes que no le han hecho daño nunca a nadie y ha sido un estigma contra la bondad divina que estos animales emulen a Matusalén, de manera que es reconfortante saber que Dios sigue siendo bueno y oye al necesitado, porque yo había llegado a creer que estaba del lado equivocado; es decir, contuberniado con el Diablo, como no es así, siento un tremendo alivio.

Sin embargo, el Señor tiene que revisar el ejército de pastores que le secundan, porque, desde los Papas hasta algunos cardenales, están en “un gato no tan encerrado”

Bueno, el mamarracho del Arauca, que eligió morir por la mano (mejor el hacha) de un grupo de cirugía hispano-cubano-ruso, casi llegó a donde iba, lo que se puede leer en cada frase que habla y cómo lo dice: “literalmente cagado en el mono deportivo que no se quita”.

Ahora el problema está en que no puede esconder nada de su enfermedad, porque un grupo de trabajo de inteligencia, que combina elementos de prensa y medicina internos y externos, notifica que sentirá un dolor en 6 meses y, a pesar del ridículo de sus seguidores negándolo, algunos de ellos ministros y hasta el vice-presidente, es más certero el disparo “enemigo” que el reporte médico del día que sufrirá el dolor.

La bola “escuálida” está haciendo más estragos en la anatomía del gorilón que el propio cáncer que padece, porque tiene a medio mundo disfrutando lentamente de esta muerte anunciada a corto plazo y no encuentra forma de pararla. Banquete se está, dando no solo en Venezuela con la angustia de este cobarde al borde del llanto cada vez que se refiere a su enfermedad.

Ahora, a pesar de que la tiranía castrista se afectará con la muerte del tirano candidato a dictador, ya se están haciendo los ajustes por aquí para que el daño sea el menor posible, no creo que nadie de la crápula esté tan preocupado porque se muera esa rata, a fin de cuentas, para algo está el Califa; o ¿Acaso no le sugirió las fronteras previas a 1967 a Israel hace un par de meses? Sin embargo, hoy amenaza a Irán con el uso de la fuerza y justifica el arma nuclear de los judíos…

Nada es la guerra del inquilino de la Casi Blanca para desviar la atención del desastre que ha ocasionado, que la Media justificará como necesaria para, después que cambie de “palo pa’ rumba” la política americana, acusar a los republicanos como los responsables; este acontecimiento es lo único, casi provocado, que alejará de los titulares el caso del cáncer de Chávez.