TAL VEZ “LA COMUNIDAD” LE INTERESE MÁS A ROMNEY

TAL VEZ “LA COMUNIDAD” LE INTERESE MÁS A ROMNEY

(8-16-12:4:50PM)

Por Andrés Pascual

Al modo mío de ver las cosas, la palabra de orden es sacar a Obama de la choza casi blanca desde la que maneja la política antiamericana del mundo, sin embargo, porque los cubanos tenemos como un designio fatal, especie de deuda con alguna fuerza omnipotente en niveles esotéricos, no nos está permitido alegrarnos cada vez que lo amerite la ocasión.

Resulta que Mitt Romney seleccionó a Paul Ryan como su acompañante en la carrera por la presidencia americana, supongo que su equipo de asesores ha visto “algo” útil en el ex gobernador como para subirlo a un potro ganador, incluso escuché que era político del Tea Party, del que soy simpatizante “hasta la tambora”.

Sin embargo, he escuchado un par de cosas que me han frustrado del candidato a vice por los republicanos: el hombre ha estado de acuerdo con la suspensión del embargo a Castro y ha votado a favor de esa moción y yo pongo de mi parte que, quien se oponga al embargo, está a favor de los viajes y las remesas a la tiranía y allá, al final, también al restablecimiento de relaciones plenas, a fin de cuentas, este es el rasero que empleo para todo el que ose sugerir que levanten el castigo al ladrón y asesino.

Yo creo que, en su visita a Miami, Romney se decidió por el Palacio de los Jugos (foto)para desmarcarse del exilio, a pesar de que Felipe Valls es el dueño del club Aché y el Versalles acoge a agentes de la Seguridad del Estado disfrazados de camareros, pero, a pesar de lo anterior, ese restaurant representa el corazón del destierro.

La única conclusión a que llegué ante el caso Romney-Ryan es que al candidato republicano le interesa menos el exilio que la comunidad fidelista y ambas mucho menos que los otros latinos.

Hace más de 3 años que escribo sobre la pérdida de poder manifiesta del cubano anticastrista en Miami, nada es fortuito ni casual: la invasión castro-comunista, los intercambiados, los agentes disfrazados de conferencistas docentes, el abuso con el Ajuste Cubano y la mantención de este no presagian, sino ratifican que estamos en una encrucijada.

Tal vez para separarse del exilio como de un enfermo de lepra, fue que este candidato declinó llevar a Marcos Rubio como compañero de boleta, porque el destierro cubano, el anticastrismo, pudiera resultarle dañino, a pesar de la presencia de “nuestros congresistas” en el acto de ayer, a la labor proselitista dentro de otras nacionalidades de la región. La baja asistencia al acto de Flagler y la 71 ave pudiera reflejar que no nos convencen ciertos movimientos de este señor.

Yo sé que el problema es quitar a Obama y al partido demócrata del camino, pero también sé que no sería con esta fórmula, si ganan, que se pueda resolver lo mínimo con respecto a la libertad de Cuba, más bien pudiera ser lo contrario, de la forma como piensa ese vice, el “Llamamiento por una Cuba mejor” está más vivo que nunca, vivo y en juego.

Voy a considerarlos como acostumbro en estos casos: este par de americanos no son malos porque lo recorten todo, sino porque pueden erigirse en una fuerza más, tan vulgar, ordinaria y traidora como cualquier otra que beneficie a la tiranía…