EL BAUTIZO DEL COMANDANTE

martes, 24 de julio de 2012


EL BAUTIZO DEL COMANDANTE
(7-20-12-5:10PM)
Por Andy P. Villa
En 1992 un amigo holguinero me hizo una anécdota sobre el hecho más  trascendental, y el más comentado, ocurrido en los últimos tiempos en su provincia natal, que coincidió con la visita de Fidel Castro a Holguín para supervisar como iba el desarrollo de esa provincia cubana. 
Resulta que después de varias reuniones con los dirigentes del Poder  Popular de Holguín y de visitar varios lugares de interés económico e  inaugurar alguna que otra obra, tuvo una especie de conferencia de  prensa o encuentro público con dirigentes y periodistas. En medio del  evento alguien le informó al Comandante que en Holguín habían tenido  la "iniciativa revolucionaria" de desarrollar un nuevo tipo de  alimento para la población, como respuesta a la crudeza del "Período  Especial". Este nuevo plato consistía en una novedosa fritura a base  de yuca principalmente, y algún que otro tubérculo que encontraran en existencia.

Se le acercaron al Comandante con una bandeja de frituras y le comentaron que aún no tenía nombre y que por favor les hiciera el honor de bautizarla.
Fidel Castro, sonriente, tomó una fritura en su mano, se la llevó a la  boca y comenzó a degustarla, pero a los pocos segundos hizo una mueca,  la escupió y gritó enfurecido: - ¡Que pin.......!
El público se quedó enmudecido ante la respuesta del máximo líder,  hasta que un dirigente partidista salvó la situación diciendo:

- ¡Quepin!, ¡Quepin!, ese es el nombre que escogió el Comandante....

Inmediatamente el pueblo reaccionó aplaudiendo y repitiendo el nuevo nombre de su novedoso alimento revolucionario, y así fue como se  hicieron famosas en Holguín las frituras bautizadas como: "Los Quepin".

Nota: esta es una historia real y para los que lean este artículo que  no sean cubanos, la frase que interrumpió Fidel Castro al darse cuenta que no debía completarla ante dirigentes y periodistas es: ¿Qué pinga  es esto?