¡VIVA CATALUÑA!

miércoles, 21 de marzo de 2012


¡VIVA CATALUÑA!
 (3-14-12-2:15PM)
 Por Andrés Pascual 
Resulta que una catalana (ni recuerdo ni intenté averiguar su nombre), está poniendo a prueba la capacidad de “aguante” de la tiranía, bueno, la realidad es que esa es la tercera opción para explicar el asunto, las dos primeras: visita papal muy próxima para un escándalo que involucre a una “extranjera” de la Madre del Patriota que se deje engañar con esa definición de España, o forma parte de un show mediático que tendrá, como siempre sucede, “resultados positivos” para la dictadura.
Hace poco se conoció, con amplio despliegue mediático, que una mujer de Barcelona premiaría, casándose con él, a quien escribiera la carta de amor más tierna que, según ella, le enviaran candidatos en Cuba.
Entonces escogió a un individuo de raza negra, proxeneta (chulo) y jinetero y lo llevó a España, donde el tipo continúa su labor relacionada con prostitutas y prostitutos.
Que nadie dude que, como el homosexual que recogió Sarita Montiel, o como el otro que llenó las noches a lo Sherezada de Marujita Díaz, el tipango debe ser de la DGI del MININT.
Ahora el mensaje es: no hay que cantar ni actuar ni bailar flamenco para tener su cubano, sepárelo por correo y recójalo en la fecha de acuerdo con Cubalse, Gaviota…
El caso de la Catalana de la Casa Prado, porque reparte premios, que en el bajo mundo de revanchas hiper-moralistas conocido como ambiente Abakuá le pudieran decir “galleguita con trampas”, volvió a los titulares con más fuerza que lo de la boda con el “epistolador”; porque, boceándose en L y 23 por varias personas, ofrece Internet a 5 euros.
Esa clase de propaganda, aparentemente “a lo loco”, que quizás sea la primera persona que se arriesga a hacerla por lo peligroso de la actividad, tanto para ella como para el que muerda el anzuelo de acuerdo al lugar donde se hace, tiene como fondo, dicen, promover un tipo de arte que desarrolla o estudia.
En el noticiero de América TeVé una “compañera” dijo: “a mi no importa la Internet ni nada de eso”, bueno, la señalé como “compañera” por el carácter ofensivo que encierra una palabra que, según mi abuelo materno, es la mejor ofensa que se le podía hacer a cualquier gusano de a pie, después de “miliciano-a”, pero no dejo de reconocer que, a lo mejor, la señora “está en la jugada” y sabe dónde concluyen estas supuestas actividades de “ayuda” a la democracia y a los cambios en Cuba muchas veces.
Otro se desencantó cuando le dijeron que había que pagar 5 débiles euritos, pero, extraño, nadie se refirió ni al control estricto de la señal por el G-2 ni que menos del 5 % tiene acceso a esta y un resto, del 2 %, solo una cuenta de e-mail vigilada por la Seguridad de Estado.
La carta que le “partió el corazón” a la paisana de Joan Manuel Serrat no se puede comparar ni con la de Jorge Negrete a Gloria Marín en Carta de Amor ni, mucho menos, con la que le deja Joan Fontaine, al borde la muerte, a Louis Jordan en Carta de una desconocida.
La del “jinete” es, ni más ni menos, que un  “fajón a través de un vulgar piropo” estilo cubano de hoy, tan grosero y desagradable como esas conversaciones que uno le escucha a estos elementos, con la entonación repugnante como hablan y que les hace rechazables desde que abren la boca.
Después de todo, además de reconocer que la “catalanita” tiene mal gusto, ¿Quién sabe si está en el gato con el G-2?