DESDE CUBA: LAS REVOLUCIONES

viernes, 13 de enero de 2012


¡COMO VIENE VA!
DESDE CUBA: LAS REVOLUCIONES
(12-26-11-5:05PM)
25 de Diciembre. 2011. 
Las revoluciones, comienzan con un marcado y delicado susurro de una Idea de que algo no está funcionando como debía o se planteaba que iría corriendo en el país, en la vida económica, social y política. La estrechez de los derechos para los más y lo dimensional por quienes (los menos) controlan lo que debiera ser de un todo. Económica o políticamente.
Quienes primeros olfatean que los aires no son los que debieran ser; son los jóvenes, que receptores de unas medidas o leyes que los quieren limitar en sus funciones socio- económicas, educacionales y finalmente profesionales, valorizan y engrandecen esos susurros protestantes de la Idea para luego dar comienzo a esas misteriosas e intermitentes convulsiones de protestas publicas y luchas callejeras e intrigas a base de secretos susurrados, ( la discusión de la Idea, de forma conspirativa), que logra que las fluctuaciones de las insondables mareas del poder, se desarrollen por fases, involutivamente para ir despersonalizando, poco a poco, uno a uno, los dioses de barro y de fantasías engañosas. Un Partido, es dictadura, dos; compartimiento de la dictadura, tres; puede ser estabilidad; cuatro o más, desenfreno de la ambición personal, sin importar el pueblo. Luego, esos jóvenes son, realmente, quienes sin quererlo en muchas ocasiones, producen los levantamientos para despojar a quienes los despojaron a ellos del poder de ejercer las limitaciones en un marco social predeterminado por la condición de ser Humano idealista o materialista, integral. En el embrión de las revolución, imprevisible de pacifismo o no, aplaudiendo que las iglesias ayuden- que modernamente lo hacen-, en la gestión,  la primera fase popular, es la del aumento y diseminación de la Idea que debe desembocar en protestas populares, en ocasiones acéfalas de persona pero, con una Idea de protestar lo malo, incluso, no despreciando y utilizando pequeñas oportunidades legales que siempre brindan, queriendo o no, las dictaduras; la segunda fase de una revolución es la previsión e inteligencia por parte de la revolución para aminorar o soslayar la inminente represión despótica que se desarrollara por aplastarla, de los “conductores” de esas limitación hacia el pueblo, dictadores o usurpadores del poder; y la tercera es la de la supervivencia y el impulso creciente de la revuelta, hasta desembocar en la caída del tirano si pierde el apoyo de su  corte, corte inobjetable e inseparable; no importa el tamaño, utilizando el arma directa de la llamada a una nueva reglamentación desconociendo de inmediato los factores anteriores que violaron o implantaron las limitaciones.
La primera etapa, la base, la Idea, es la más constructiva y la más emocionante para los jóvenes participantes, la que fluye en su espíritu e inunda la sociedad, un material digno de cualquier resolución mística mundial o cubana, pero suele ser la menos importante para muchos políticos de corte costumbristas o pacifistas en el mundo actual. Las revoluciones no terminan casi nunca como parecen empezar, y las consecuencias siempre pueden ser totalmente distintas de las intenciones de los revolucionarios, lo que no significa que se le puede o debe tener miedo a una Revolución por nacer. Pueden tardar años, en aparecer, no meses o días; como muchos sesudos de la payasada auguran en el caso cubano pero, lo que importa es quién controla a quién al final. La esperanza es que sea el pueblo cubano, el que de verdad acabe por limitar al Estado, cualquiera que este Estado sea, con una Nueva Constitución.
Partido Revolucionario Patria.