EL TURISMO NO HA MEJORADO LA VIDA DEL CUBANO

sábado, 8 de octubre de 2011

UNA CONTUNDENTE RESPUESTA AL SOFISMA DE LOS OBAMISTAS
EL TURISMO NO HA MEJORADO LA VIDA DEL CUBANO
(11-8-11-8:35AM)
 Por  Guillermo Enrique Arbella Salazar -OPINA-PRESS-Cuba
La llegada de más de 140 mil turistas a este país en lo que va de año, no ha significado mejoría ni beneficios para el pueblo cubano “de pies descalzos”. 
Los turistas extranjeros y cubano americanos que visitan la isla no se interesan ni se han interesado nunca por la triste situación del pueblo, ni de sus marginados (personas sin hogar, en tránsito desde otras provincias para la Capital y atrapados en una jungla burocrática que les ha dejado sin hogar y sin posibilidades humanas de subsistencia, vagabundos, mendigos, indigentes y menesterosos), ni por las constantes violaciones de los derechos humanos, la falta de democracia y pluralidad política, tampoco se han interesado por el movimiento de resistencia política y civilista, ni la permanente represión que sufren, ni por el abandono en que se encuentran los periodistas independientes y los disidentes y opositores pobres, de los que se apartan como si sufrieran una enfermedad infecto-contagiosa, “para no atraerse problemas con las autoridades, que puedan impedirle su estancia o nuevas visitas al país de las prostitutas más baratas y más abundantes que en cualquier otro territorio,” explico Stefan Kuhler-Böhme, un turista. 
El incremento del 18% de visitantes en los últimos 4 años, con un ingreso superior a los 2 218 millones de US dólares, tampoco ha significado nada para la mejoría del nivel y las condiciones de vida y existenciales del cubano. 
Los turistas, incluso, se hacen los desentendidos ante los reclamos de limosnas de los miles de mendigos, indigentes y menesterosos, pasando entre ellos como si éstos fueran fueran invisibles, olvidando que al donarles una moneda de 0.25 centavos CUC, les están regalando un bocadito sencillo de jamón embutido, o un pan de 200 g y 500 ml de refresco gaseoso, con los que puede “engañar al estómago.”