INTERCAMBIO AMISTOSO DE OPINIONES ENTRE ESTEBAN FERNÁNDEZ Y ALDO ROSADO-TUERO

martes, 14 de diciembre de 2010

INTERCAMBIO AMISTOSO DE OPINIONES ENTRE ESTEBAN FERNÁNDEZ Y ALDO ROSADO-TUERO
(12-14-10-10:15AM)
En el orden acostumbrado: Esteban Fernández y Aldo Rosado-Tuero
Cruce de e-mails entre dos hermanos de lucha, separados por miles de millas de distancia, pero muy cerca en sueños, aspiraciones y esperanzas.
Respuesta a NOTA DEL DIRECTOR 
Estimado Aldo: Para mí no es cuestión de perdonar o no perdonar. Jamás he recibido una llamada de nadie pidiendome perdón. Además, yo no soy juez ni jurado para perdonar a nadie. Simplemente me conformo con no aceptar como amigo a ninguno de los que nos llevaron  muy recio en Güines.
Mis amigos, mis hermanos, son gente como tú, como Luis Crespo, Guillermo Novo, Alvin Ross, Sara Martinez Castro, Henry Agüeros, Carlos Hurtado, Enrique Artalejo, los ex presos políticos, los Brigadistas, los Alphistas, y muchos patriotas más. Con esos me son más que suficientes.
Nadie que gritó "paredón" lo quiero ni a cien millas de mí. Y si trata de darme la mano lo mando al carijo. Un abrazo, Esteban Fernández 
RESPUESTA DE ALDO A SU HERMANO ESTEBITA:
Querido hermano:
Esta nota no tiene nada que ver contigo, ni nada que hayas escrito sobre el perdón. Fue escrita hace mucho tiempo como lo verás en la propia publicación, y si la reproduje, fue debido a la época navideña, en que el perdón debe de estar presente, pero siempre que haya arrepentimiento verdadero, y que como aclara bien claro y en rojo la nota: "Pero lo principal es: que hubo arrepentimiento sincero y que ninguno se manchó las manos de sangre."
Nunca he defendido, ni defenderé a los que cometieron crímenes o indujeron a otros a cometerlos.
Gracias por incluirme en el círculo de tus amigos. Tú estás desde hace mucho tiempo en el de los míos.
Un fuerte abrazo y lo mejor de la Navidad para ti y tu familia, con la esperanza de que el nuevo año nos traiga hecho realidad nuestro viejo sueño.
Te quiere
Aldo
Solo una opinión, usted es mi hermano. Aldo, No me sentí aludido, solo te estaba dando mi opinión.
Esteban