Según la activista Tania Rodríguez Reina, esto es algo que los niños de esta comunidad pobre agradecen mucho, dibujan se divierten, oyen música, a reciben sus presentitos como libros de cuentos, educativos para niños como para aprender a colorear y de inglés para los infantes, plumones, lápices, sacapuntas y otros enseres.
“Tratamos dentro de nuestras posibilidades alegrarles de alguna manera sus duras vidas, pues son niños de una comunidad muy pobre y marginal, propensos a en el futuro abandonar las escuelas y hasta delinquir, con lo poco que tenemos tratamos de sacarlos de las esquinas, pero todavía es insuficiente aspiramos a lograr recurso educativos y materiales de distracción que los ocupe en nuestra sede del Guasimal 9ª aprovechando sus tiempos libres para que jueguen, y se preparen con vista a un futuro mejor”, concluyá la fuente
Reporto: Lilvio Fernández Luis
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