PUNTO Y. APARTE

domingo, 4 de noviembre de 2012

PUNTO Y. APARTE
(11-1-12-4:30PM)
Por: El Director
Oído a la caja, que según se va perfilando cada día más la victoria de Romney sobre Obama, algunas organizaciones izquierdistas y sectores radicales del Partido Demócrata, están buscando desesperadamente pretextos para que se suspendan las elecciones generales del día 6.
Algunos creen que la tormenta Sandy les dió la oportunidad de dar "la sorpresa de noviembre" que se había venido comentando, y que algunos argumentaban que podía ser un ataque terrorista de envergadura contra territorio norteamericano o bien, un ataque israelí a Irán, antes de las elecciones, que obligaría a los EE. UU. a involucrarse, dando el pretexto buscado para una suspensión de las elecciones.
Harto sabe el que quiere ver con sus propios ojos que en la gran prensa, la hipocresía es una industria y la traición el desenlace de casi toda sus actitudes, pues según los beneficios que crean lograr dirigirán sus habituales calumnias, porque en los entresijos de empresa y redacción se puede jugar con los negocios, el odio y la justicia, las carambolas más atrevidas.
La experiencia de esa típica inmoralidad de los periódicos nos hace pensar que lo más probable será el viraje de la prensa dominante hacia la nueva versión del comunismo bautizada como Socialismo del Siglo XXI, ante la certeza de que la inmensa mayoría de los cuadrilleros de la pluma y la palabra tiene ya colocadas sus degeneradas aficiones en la futura esclavitud contra la nación, que se pretende encausar con los métodos bolcheviques.
Hay pruebas más que fehacientes de que en el fondo de los mentores de la gran prensa y de la política presente en la actual Administración que aspira desesperadamente en aferrarse al poder otros 4 años más por lo menos, hay una complaciente inclinación al socialismo totalitario.
Tenemos la obligación de denunciar que existe un empeño oculto de precipitar a los Estados Unidos en el pozo negro del comunismo, porque vemos en esferas del gobierno y en la prensa impulsora y defensora a ultranza de la actual Adminisitración, una resolución balbuceante y a veces contradictoria, pero innegable ya, de entrar a la próxima etapa de una dictadura de tipo socialismo del Siglo XXI, cuando ya existen sectores que están hablando, que después de la re-elección de Obama, que dan por segura, habrá que ir preparando las condiciones para que éste pueda aspirar a un tercer período.
La demagogia socializante utiliza la calumnia, la gritería, las grandes promesas--sobre todo sembrando el odio de clases--, la coacción del motín y el barrage de periódicos, radio y televisión mintiendo descaradamente y desecrando los valores tradicionales, mientras alaban la inmoralidad y el relajamiento de las costumbres inherentes a nuestra tradicción cristiana.
Se trata de cazar votos, de domesticar ciudadanos, y ya se sabe que en uno y otro arte son utilizables el cebo, el veneno, el lazo, la estaca y aún la pólvora, más el dinero, la dádiva y los favores; lo importante es no tener escrúpulos, sino afición, y seguir sin desmayo la presa de la mayoría, que al fin se alcanza con las campañas sistemáticas cientificamente calculadas.
Una vez en el poder y con una mayoría de cazadores de votos triunfantes, el arte, como es natural, está en escamotear todas las promesas y en ir soslayando todos los bellos compromisos, cargando al adversario con la culpa de no cumplirlos.
Por todo eso son tan importantes las próximas elecciones que han de celebrarse en 5 días porque lo que está en juego es el camino que tomará esta nación.
O con Obama hacia la vía al Socialismo del Siglo XXI; o con Romney hacia el regreso a los valores tradicionales americanos que han hecho grande a estan nación.