POR FAVOR, ¿PARA DÓNDE MUDARON AL EXILIO?

lunes, 18 de junio de 2012


POR FAVOR,  ¿PARA DÓNDE MUDARON AL EXILIO?
(6-14-12-6:15PM)
Por Andrés Pascual
Hace un año y medio que escribí un material titulado “Miami no se perdió; está casi perdida”, hoy no me arriesgaría, porque más del 80 % está en manos del castrismo, lo que significa que es la ciudad.
Los últimos acontecimientos con el circuito Univisión no sorprenden, lo que debió sorprender, en su momento, fue la venta de esas emisoras por el sistema cadena que, a la larga, irían a las manos de la tiranía, porque cuando se está en contra del exilio, se está a favor de la dictadura, por lo que el mensaje cambiará radicalmente a uno completamente pro castrista, pro “hermanos de ellos” como la Raza, o asumiendo la posición más venenosa cuando se quiere compartir una posición ideológica sin descubrirse: la apatía.
Los dos diarios de la ciudad, “el primero con las últimas y el último con las primeras”, en manos de la filosofía castrista, en el caso del antes llamado aliado y amigo de la causa cubana, por la vía del rating a favor de la comunidad venezolana y de otras que ya saben que tienen más poder, aunque, todavía, mantiene la posición del corcho, que deben desecharla en cualquier momento, porque el reclamo nuestro ya no puede hacerles daño, es muy débil. Para empezar, la página deportiva no tiene a ningún exiliado ni de comunidad colaborando y eso es el comienzo, “cosas veredes Sancho”. A pesar de que escriben ahí algunos cubanos exiliados, incluso congresistas, están más del lado de allá que de acá.
Parece que la tiranía está tan segura de que Miami es Territorio Libre de América, que, como aparenta, ni por el filtro pasan a sus representantes en el intercambio de Obama, la tiranía y Saladrigas, por lo que todos los días se informa que, compañías completas de teatro, de ballet… plantan campamento en la ciudad, como si formaran parte de aquellas brigadas artísticas que dirigían Manolo Riffat y Amaury Pérez, que estuvieron durante la eterna zafra de los 10 millones que fueron, actuando en cada campamento de cortadores de caña en todo el país.
Cuando Armando Pérez Roura(foto a la izquierda) sacó a Enrique Encinosa de Mambí, me dio mala espina, cuando contrató a su nueva voz bilingüe para la sección deportiva, me dio mala espina, porque Jerry no es un procomunista ante los micrófonos, sino un desganado ante el tema cubano, lo que es igual o peor.
Dice la sucursal Triple A del Granma con home-club en la Bahía que Univisión logró lo imposible: el abrazo fraterno y equilibrado entre dos opositores, Pérez Roura y Oscar Haza, bueno, yo nunca vi a Haza como alguien pro exilio ni favorable a la causa cubana, sino como un vulgar oportunista y, debo decir, que tampoco al “mejor discípulo de Martí como hombre bien nacido”, en su caso, siempre lo he visto como el resultado de sus intereses personales, o sea como un negociante. No obstante, una vez que alguien creyó que eran contrarios en este asunto, ¿Cuál de los dos merece el calificativo de gusano, de traidor, de procastrista?
A decir verdad y pese a todo, el posiblemente mañana empleado raso de la Grande nunca habló algo que favoreciera a la dictadura, por lo que Oscar Haza (foto), que supongo tendrá mucho “punch” en su nuevo frente de batalla, cumple todos los requisitos para clasificar como lo que dije antes.
¿A quién se puede culpar por todo lo que está pasando y por lo que falta? Al propio exilio, que ha sido condescendiente con cualquiera sin ser radical en el análisis obligado, el mismo que apoyó el primer paso de la política Castro-Carter (el Mariel), con el contubernio de castristas “históricos” para liquidar al destierro.
El que no reconozca ampliamente lo nocivo del Ajuste Cubano en la política de zapa histórica de esta ley mantenida con malas intenciones es procastrista o le saca billetes.
El que apoye al Ajuste Cubano es castrista, aunque no lo quiera reconocer, en unos casos; en otros, aunque no se haya dado cuenta todavía.
El que apoye los viajes y las remesas entra en la misma definición anterior y el que esté de acuerdo con los intercambios también.
El crecimiento de la “comunidad” les ha dado la oportunidad a los organismos americanos de izquierda para que propongan políticas basadas en “la mayoría de los cubanos de Miami apoyan políticas de acercamiento…” y es verdad, porque hoy son mayoría aquí, visibles y que suenan.
Los hijos de los exiliados históricos, como sucedió y sucede en Cuba, fueron dejados en las manos de un sistema escolar contaminado por el liberalismo, el pro-castrismo, el antiamericanismo y el filo-comunismo. Que a un muchacho nacido aquí se le enseñe a comer arroz con frijoles negros no es suficiente, es, más bien, “un barniz para la gradería, no para el gil que nunca entiende”.
En 1978, 1979, 1980…los aviones repletos de “comunidad” que aterrizaban en Rancho Boyeros con pasajeros forrados de tasajo o bacalao y con hasta 10 sombreros “de panza de vaca” imitando al Stetson, no eran del Mariel ni balseros y eso también cuenta.
El público de los comunistas Alexis Valdés, Carlos Otero… está compuesto por buena parte del “exilio histórico” también, la justificación, siempre, “yo no sé inglés mi hijo, ¿Qué quieres que haga?” Y entonces se olvidan de algo que se llama principios.
Yo no soy pesimista ante el problema cubano, más bien debo ser el padre del pesimismo: ni engordando disidentes en Cuba ni a patrocinadores aquí se puede eliminar al castrismo.
En cualquier caso hay que ser realista, habría que presionar bien a una administración republicana para que haga con la tiranía lo que han hecho en otros lados sin que se los pidan, incluso sin tener un exilio doliente.
El que se oponga a esta presión (la intervención americana como Dios manda) también es de factura castrista, capaces de emplear palabras como anexionismo o “el problema de Cuba lo tienen que resolver los cubanos”, con lo que aseguran su “diezmo” y la continuidad de la sucesión tiránico-dictatorial que, en el caso del 90 % de los disidentes allá y los que los dirigen aquí, su interés principal aparenta ser el grant, el micrófono, el periódico, los viajes y el protagonismo.
Creo que llevamos bastante rato en esto como para seguir comiendo mierda, si no se puede hacer que el gobierno americano tome conciencia y resuelva un problema que no podemos, tanto por la pérdida de poder como por la lucha intestina por el protagonismo, mejor cerrar, que, viéndolo bien, ya perdimo el último bastión por la libertad de Cuba con la caída de Miami en manos enemigas. Que quede solo la moral hasta ver si un día…