SALÍAN A ROBAR DE NOCHE CON AUTORIZACIÓN “DE ARRIBA”

lunes, 7 de mayo de 2012


SALÍAN A ROBAR DE NOCHE CON AUTORIZACIÓN “DE ARRIBA”
(5-7-12-5:15PM)
Por Andrés Pascual
Le zumba la carabina de Ambrosio que España se moleste tanto por lo que les robó Cristina K en Argentina, pero lo que enciende la “gandinga” es que busquen consenso internacional para que sancionen a “la montonera”, cuando llevan tanto tiempo cabildeando contra las sanciones que se le aplicaron a la tiranía castrista por lo mismo. Bueno…
Dice El País español que “…Obama apela a consolidar avances sociales…” ¿De qué avances se habla? Del apoyo a las organizaciones “gays”? ¿A la implantación del socialismo con todo el lastre de destrucción que  deja a su paso sí, a la fundamentación de posibles leyes contra las libertades civiles, también; ahora, lo positivo para la sociedad, Quién lo ha visto durante estos 4 años? Si sale reelegido “a correr liberales”, malo porque “de aquí pa’llá no hay más pueblo”, así que defiende lo que te queda, que ni para quejas dejarán buzones.
IKEA utilizó reclusos como mano de obra gratis (en el feudo castrocomunista se le llama dispuesta y para todo el mundo esclava). La tiranía tal vez diga que se les pagaba el salario de preso (menos de 30 pesos al mes) que, según me contaban algunos que trabajaban, la mayoría de las veces no podían cobrarlos los familiares por atrasos que no tenían carácter retroactivo…
Pero quiero hablar de otro uso que se les daba a un grupo de reclusos en el Combinado del Este durante casi toda la década de los 80’s, entre los que hubo politicos.
Tal vez porque eran decentes, responsables,  serios o chivatos, no me arriesgo a escoger un calificativo, el alto mando de la prisión, para satisfacer las necesidades de los oficiales a cargo del penal, seleccionó a un grupo de reclusos, especie de brigada móvil con dos carretas y dos tractores (foto de archivo, solo para ilustrar), para que se encargara de robarle a particulares, con la complicidad de la noche, los materiales que cualquier persona tuviera por toda La Habana y sus alrededores en los portales o frente a sus casas para efectuar arreglos. Desde bloques, cemento, madera, ladrillos o arena, todo era “paleado” o cargado en las carretas y llevado a la prisión, desde donde los enviaban  después al exterior del penal en camiones, con otro grupo de presos operarios de albañilería y carpintería, que se encargaban de hacer el baño, el portal, un cuarto o la casa completa de un “sacrificado y humilde oficial del MININT”, incluso algunos del MINFAR.
¿Los sorprendieron alguna vez?, nunca, ahora, de poco hubiera valido, porque de producirse, la jugada hubiera cambiado a “registro policial” y la defensa de la propiedad se podría convertir en una causa por “robo y tenencia illegal de materiales para su distribución” más que para uso personal.
De amueblar la casa o de sustituir algunos electrodomésticos por otros, se encargaban el taller de refrigeración de la planta de prefabricado, la carpintería y el taller de radio y television de Artesanía en el edificio # 2.
Los puercos, de la “granja de autoconsumo” también del Combinado y, los Conejos, de la recría; pero la ropa que muchísimos familiares exiliados donaron durante el indulto para que sus familiars presos salieran vestidos del penal en 1978-79, que nunca le entregaron a sus destinatarios, también formó parte de la oferta.
Así que lo de IKEA, por mucho que duela decirlo, es solo algo más que también conocíamos de esa barbarie.