OTRO ÁNGULO DE LA LIBERTAD DE PRENSA

viernes, 30 de marzo de 2012

DE LOS ARCHIVOS DE NUEVO ACCIÓN
(3-28-12-8:55AM)

LA HISTORIA EN LA MEMORIA

OTRO ÁNGULO DE LA LIBERTAD DE PRENSA

Por Aldo Rosado-Tuero
Hace algún tiempo, después de ganarle un caso en las Cortes al Reader Digest, el periodista cubano, Antonio Llano Montes, se encontró con la sorpresa de que a pesar de haber  obtenido el permiso legal para usar el nombre de Selecciones en su revista; por presiones de la empresa Readers Digest, todas las distribuidoras de publicaciones se negaron a distribuir Selecciones de Antonio Llano Montes, develando otro ángulo de los peligros que corre la libertad de prensa.
No son sólo los gobiernos dictatoriales quienes amordazan periodistas. También lo hacen muchas empresas periodísticas, que responden a los grandes intereses financieros y políticos; y los grupos de poder, que se valen de todos las triquiñuelas posibles para ahogar las voces independientes, usando para ellos hasta la Mafia, que controla, la mayoría de las compañías comerciales de distribución de publicaciones.
Como un ejemplo les cuento el siguiente episodio de mi vida. En 1966, con el impulso,  pero también con la inexperiencia que da la juventud, yo creía que me podía comer al mundo. Con un entusiasmo sin límites me lanzé a una aventura que casi todos mis amigos me vaticinaron sería imposible de que alcanzara el éxito: lanzar una revista en español desde Miami.
En esa época yo estaba inmerso en la lucha activa contra la tiranía cubana y me había propuesto  armar una cadena de colaboradores y aliados en toda América, al margen del Gobierno y de los organismos de inteligencia norteamericanos.  Y en cierta forma lo logré, con bastante éxito, pero esa es una historia que será contada con lujo de detalles  en otra ocasión.
Utilizando amistades, vínculos ideológicos y llamadas a la solidaridad para con mi pueblo esclavo, logré armar una impresionante cadena de corresponsales, en las principales capitales  iberoamericanas, en otra ciudades a través del mundo  y de los propios Estados Unidos. Contando con el respaldo de bastantes anunciantes, armé el primer número de "Panorama,revista de información mundial". Ese primer número contó con brillantes plumas, siendo la pieza central un reportaje-entrevista  de quien actuaba como corresponsal viajero, el excelente periodista  Pierre Lamotte, a varios de los mercenarios del Congo, que después adquirirían fama mundial, como el Mayor Bob Denard.  Y para el segundo número contábamos con una entrevista exclusiva con el General Chiang Kai Shek. En fin, una buena revista independiente, para la época que vivía Miami.
Era el tiempo de las revistas y periódicos pagados por la CIA. Nosotros surgíamos independientes, sin pedir permiso y sobre todo, sin ataduras ni compromisos políticos, confiando en la amplia libertad de prensa que ofrecen las leyes de este país.
Pero no habíamos calculado otro factor tan importante en la publicación de un órgano impreso, como el de la distribución. Cuando se tiene veinti y pico de años y un mundo de ilusiones en la cabeza, suelen cometerse estos  errores que la gente mayor llama estupideces. Y cuando ya el primer número (que resultó también el único) estaba en imprenta, nos encontramos con la desagradable noticia de que ninguna de las agencias distribuidoras aceptaban la nueva revista para su distribución comercial.  A fuer de sinceros confesamos que nunca llegamos a saber si lo hicieron por razones comerciales o por presiones políticas, pero lo cierto fue que,  con esa negativa a rajatabla, le pusieron la soga al cuello al proyecto. Tuvimos que salir corriendo para la imprenta, para quitarle el precio de venta de la portada, y estamparle, en una esquina, la palabra gratis, para regarlarla en algunos establecimientos que la aceptaron.  Así nació y murió "Panorama".
Moraleja: La libertad de prensa tiene muchos enemigos escondidos y no bastan las leyes que la protegen, para que florezca.(Publicado en la edición del sábado 4 de noviembre del 2006)