LA OPINIÓN DE PERICO

viernes, 13 de enero de 2012


LA OPINIÓN DE PERICO
(12-27-11- 5:10PM)
Por Pedro Descon Fhiado aka "Perico El Preguntón"
Hoy es un día de fiesta para mí. Desde  que regresé a la USA, después de una desafortunada incursión por un país suramericano en que el socialismo del Siglo XXI ha sentado sus reales, he estado prendido detrás de Aldo Rosado-Tuero, pidiéndole un espacio en Nuevo Acción para hacer mis  descargas y compartir  mis dudas con los muchísimos lectores de este diario digital sui géneris, que se sale de los moldes y dice las cosas que no muchos dicen.
Tal parece que el Director, con el nuevo año regresa a su otra pasión, que rivaliza con su obsesión por participar en la lucha por la libertad de Cuba: la crianza de aves exóticas y raras, y eso le quitará tiempo para escribir  y por eso, me da, al fin, la oportunidad que tanto le he pedido.
Aquí no espere el lector encontrar sesudos análisis de eruditos, como otros que compartirán conmigo estas páginas, sino las dudas y preguntas que tantos de nosotros--simples mortales--nos hacemos cada día ante los acontecimientos y las actitudes de muchas figuras que opinan y participan de alguna manera en el drama cubano.
Por ejemplo: la primera duda que me asalta es sobre la conducta de Oscar Peña (foto), el del Comité de Derechos Humanos. El que siempre aboga por los que están en la acera de enfrente (los defensores de la tiranía) y escribo en la acera de enfrente, porque según muchos (entre ellos el Director de esta publicación) Oscar es enemigo del castrismo, pero yo afirmo, que en realidad, con adversarios como Peña, la tiranía no necesita amigos.
Ahora mismo, hace unos tres días, en un  artículo publicado por el Nuevo Herald, Peña acaba de ensañarse con el Representante Republicano Mario Díaz Balart. Comienza su artículo diciendo: "La trampa legislativa que hizo Mario Díaz Balart de meter silenciosamente de contrabando en un paquete la limitación de los viajes a Cuba (una medida que no prosperó en el Congreso) es como si el mismo congresista sacara en sus oficinas de Miami y Washington un cartel grande y lumínico que dijera: “No me interesa lo que quieran el pueblo de Cuba y la mayoría de los cubanos de Miami."
Yo, como muchos lectores tengo algunas preguntas que hacerle a Peña: ¿Cómo demonios sabe Oscar Peña que"el pueblo de Cuba y la mayoría de los cubanos de Miami", están por el relajo de los viajes sin regulaciones y por seguir alimentando y ayudando a sostener a la satrapía castrista económicamente? ¿Por qué se refiere solo a la "percha" introducida por Díaz Balart y lo acusa de "meterla silenciosamente y de contrabando" mientras calla ante la otra "percha"(esta sí introducida silenciosamente) que pretendía que la tiranía pudiera comprar en los EE.UU. a crédito? ¿No fue esa "percha" también "enganchada" en el mismo paquete presupuestal por amigos del castrismo? ¿Por qué entonces Oscar peña no la critica, y ni siquiera la menciona? ¿Es que acaso a Peña le hubiera gustado que esa "perchita" hubiese pasado a la chita callando?
Tengo otras preguntas para Oscar: ¿Por qué en todos sus escritos usted siempre ataca a los anticastristas y sus acciones y jamás roza ni con el pétalo de una rosa a los castristas? Ud le compra cuadros a Roberto Robaina, quiere invitar a Pablito Milanés a almorzar y se manifiesta a favor de toda medida que favorezca al castrismo. ¿Cómo demonios espera usted que se le siga considerando un anticastrista?
¿No cree usted que ha llegado la hora de ser consecuente con lo que predica y declararse correligionario de Edmundo García, Max Lesnick y Andrés Gómez? Créame que si lo hiciera, yo, al menos, lo respetaría más.