OTRA PRUEBA QUE DEMUESTRA LAS MENTIRAS DE PERCY ALVARADO

OTRA PRUEBA QUE DEMUESTRA LAS MENTIRAS DE PERCY ALVARADO

(12-8-11-5:00PM)

En el artículo preparado por el aparato de difamación de la tiranía castrista que aparece más arriba en esta edición, firmado por Percy Alvarado, se afirma tendenciosamente que el libro de Al;do Rosado-Tuero "Recuerdos de Aurelio" fue premiado por el Grupo Almiquí, porque ese grupo era una fachada de la CIA. Otra vez se vuelven a coger al trasero con la puerta y a quedar en ridículo ante lo absurdo de sus afirmaciones, tan alejadas de la verdad.

El Grupo Almiquí llevaba ese nombre precisamente por ser el almiquí una especie endémica de Cuba en peligro de extinción y adoptaron ese nombre porque sus miembros se consideraban a su vez una especie de cubanos en peligro de extinción, pues en los tejemenejes de la guerra fría se declaraban equidistantes de los dos imperios hegemónicos de la época. Y en el exilio eran de los cubanos que no aceptaban directrices extranjeras, por lo tanto, es obvio que no solo no eran una hechura de la agencia norteamericana de espionaje, sino que eran contrarios a ser sumisos a los dictados de una potencia extranjera sobre los asuntos de nuestra patria, llámasese esa potencia URRS o USA.

Y como prueba publicamos el pequeño capítulo dedicado a ese grupo en el libro de Roberto Cruzamora, ex capitán del Ejército Rebelde, y ex prisionero político del castrismo, "Flocloreano":

"LOS ALMIQUÍES", por Roberto Cruzamora

Los Almiquíes, taller de creación poliartística y posición sociopolítica de "minorías", toman el nombre del Solenodon Cubensis, el Almiquí, autóctono de Cuba.

Este animalito vive actualmente en lugares apartados, de didificl acceso y exiliado, sí, dentro de las demás especies que lo circundan. Siente justificado temor ante los osos y las águilas, las víboras y las pirañas. Cuando alguna vez se aventura a salir más allá de los límites que la prudencia indica, escarba con gracioso disimulo en la arena blanda o en la tierra dura y estéril un símbolo que recuerda al pescadito de los cristianos de las catacumbas. Observa entonces de hito en hito a sus congéneres más cercanos. Si la reacción es una sonrisa y un aquiesciente gesto con la cabeza, que solo pueden saber los iniciados, chilla de gozo y se hace seguir hasta donde están aguardando los demás. Si por el contrario percibe un gruñido o gesto de cabeza dubitativa en trance de caja de resonancia hueca, se echa a correr zigzagueando para despistar a quien o quienes prfetendar seguirlo. Porque digámoslo sin pelos en la lengua:históricamente el Almiquí ha sufrido una caza sin veda, como mpara que le sea difícil procrear y perpetuar su especie.

Será por eso que dicen que está en proceso de extinción. Yo no lo creo.

Flocloreano aseguró siempre que detrás de la apariencia inofensiva e inocente del animalito, se amurallaban voluntad y razones de supervivencia futuras. Que eso, específicamente, determina que el Almiquí viva como vive y se resista tenaz a no dejarse extinguir de ninguna manera".

Hasta aquí el capítulo que explica la esencia de ese grupo o sociedad. A buen entendedor con pocas palabras basta.