LOS PIONEROS DE LA COLMENITA

miércoles, 26 de octubre de 2011

LOS PIONEROS DE LA COLMENITA
(10-24-11-5:10PM)
Por José M. Izquierdo 
Los niños, maravilloso tesoro de una familia y la sociedad, son la esperanza del mundo, una piedra en bruto que toma forma de las manos del escultor. Los niños no nacen sabiendo, se forjan con el ejemplo y la dedicación de sus padres, de la sociedad en que crecen. Por eso, los líderes de regímenes socialistas, totalitarios y fundamentalistas como  la tiranía castrista en Cuba, controlan la educación de los niños y jóvenes desde  la más temprana edad, hasta su formación profesional.
En la Cuba “Revolucionaria” de los hermanos Castros, los niños son formados como un instrumento político desde su más temprana edad, su educación es concebida como una forma de forjar sus mentes, (Adoctrinarlos), para crear una meticulosa fábrica de hombres fieles que garanticen un ciudadano obediente y leal a los valores de la doctrina Castro-comunista.
El más reciente ejemplo de niños adoctrinados y utilizados como medios de propaganda, lo tenemos en el grupo teatral cubano “La colmenita”, integrada por 22 niños (Pioneros) entre 6 y 16 años, que viajan por los EEUU, en un ómnibus pintado con propaganda castrista sobre los cinco espías cubanos, presentando espectáculos teatrales de fuerte contenido político ideológico, al pedir a los cuatro vientos, libertad para los cinco espías cubanos condenados por las cortes de este país. El grupo teatral “La Colmenita” fue invitado como parte de un mal llamado acuerdo de intercambio cultural.
La única voz del Congreso de los EEUU que ha denunciado esta provocación (Que sepamos), y la utilización de menores como propaganda política por un estado enemigo en territorio nacional, ha sido la congresista cubano americana y presidenta del Comité de Relaciones  Exteriores de la cámara de representantes, Ileana Ross-Lehtinen que expresó, “La presencia en Estados Unidos de los 22 niños del grupo de teatro infantil cubano “La Colmenita” es parte de una política que socava las prioridades estadounidenses de política exterior y los intereses de seguridad nacional”.
La Colmenita tiene programadas presentaciones en importantes ciudades, escuelas y centros culturales estadounidenses, así como una función especial en la sede de las Naciones Unidas (ONU), en el mismo organismo mundial que tiene el deber de proteger los derechos de los niños sobre todas las formas de explotación. La UNICEF, lo permitirá y elogiará. Allí estos niños expondrán no su arte, sino el fruto de su adoctrinamiento, son niños obligados desde la más temprana edad a formar parte de una organización gubernamental dirigida y controlada por el PCC, que les impone una formación ideológica Castro-comunista. ¿Qué vía de comunicación puede ser mejor  y más efectiva para regar el veneno de una ideología como la Castro- comunista que usar niños adoctrinados?
La libertad de expresión que garantiza la constitución de los EEUU debe ser para los estadounidenses y para quienes respeten esas libertades, no para que los enemigos de este país la utilicen para agredirnos. Cuba, la tiranía castrista, no permite actos similares en la isla, reprime con violencia las pacíficas manifestaciones de los disidentes y opositores cubanos como las “Damas de Blanco” y encarcela a quienes tratan de ayudarlos, como es el caso del contratista norteamericano Alan Gross, a quien condenaron con largos años de cárcel y tratan de usar como rehén y objeto de intercambio, por los cinco espías cubanos encarcelados en este país.
La administración Obama debía expulsar a estos provocadores pioneros disfrazados de artistas y dirigidos por un comisario político, que a la vez hace la función de custodio, revisar estos mal llamados intercambios culturales de una sola vía, muy bien utilizados por el régimen en su beneficio, como pidió la congresista cubano americana Ileana Ross-Lehtinen, y no permitirle a este grupo de chiquillos provocadores amaestrados, que sigan regando su veneno ideológico en estas tierras. La ONU, más específicamente la UNICEF, en lugar de aplaudir a estos niños, debía condenar el abuso que representa utilizar niños para propaganda con fines políticos ideológicos.
Sabemos que nada de esto pasará, el grupo teatral infantil cubano “La Colmenita” terminará su gira (trabajo de propaganda) por los EEUU  y la ONU tranquilamente, donde serán aplaudidos y elogiados. Los EEUU de América, faro de las libertades en el mundo, dispuesto a enviar sus jóvenes a morir por defender la democracia y la libertad en cualquier rincón del mundo, está indefenso ante un grupo de chiquillos pioneros, que como el “Caballos de Troya”  los castro han introducido en los EEUU. ¡Qué pena, que la administración de la Casa Blanca, permita estos absurdos!