LOS MALOS TRIUNFAN DONDE LOS BUENOS SON INDIFERENTES

LOS MALOS TRIUNFAN DONDE LOS BUENOS SON INDIFERENTES

(7-19-11-5:00PM)

Por Aldo Rosado-Tuero

A 8 días de haber publicado por primera vez la foto del agresor de Joel Rodríguez Riverón (en la foto grande de arriba) y a 4 de haber lanzado Nuevo Acción la idea de hacer una ponina para ofrecer una recompensa a quien nos logre dar la pista para identificar y localizar al esbirro golpeador, solamente Eduardo Vidal del Movimiento Popular Cubano, desde España, ha hecho una promesa de donación para unirla a los cien dólares ofrecidos por Nueva Esperanza. Nadie, absolutamente nadie, ha prestado la más mínima atención a este esfuerzo para alentar la búsqueda del esbirro que golpeó al joven Joel, frente a las oficinas del Congresista Mario Díaz Balart.

Ni siquiera los organizadores de la contra marcha que llevaron a Joel a esa confrontación, y a cuyo grupo pertenece el agredido, han sido quienes para prestar la menor atención a este llamamiento. Ni Carlos Goicolea (foto a la izquierda), de Exilio Unido Ya, ni Manuel Prieres, de Villa Granadillo y los autoproclamados "rockys" (sinónimo de "duros") han sido capaces de demostrar esa "dureza" ofreciendo sacrificar aunque solo sea unos dólares de sus bolsillos para incentivar a otros a que los imiten y así podamos lograr que se sepa finalmente la identidad del sujeto. Tal pareciera que quisieran que esto quedara ya en el olvido.

Todo indica que no les interesa para nada que aparezca el individuo o no. Total, parecen conformarse con los  quince minutos de fama que les dio el incidente y ahora tienen que dedicar todo su tiempo a organizar la próxima protesta donde volverán a tener unos minutos de notoriedad, cuando venga Pablo Milanés.

Y francamente, alguien tiene que asumir el pesado papel de decir las verdades que saltan a la vista, pero que todos soslayan; y como nadie lo hace, yo salgo a decir cuatro verdades, para ver si les saco los colores a las caras y se percatan de que con esa actitud de sentar tiendas aparte y no coordinar ningún intento serio, no lograrán nunca nada efectivo.

Esta actitud de iniciar un proyecto, dar la cara para las cámaras y sonar por diez minutos en los noticieros, sufrir burlas, recibir golpes y después quedarse de brazos cruzados sin seguir en la tarea de hacerle pagar las consecuencias a los agresores, es la culpable del avance de la quinta columna y los castristas en este otrora combativo exilio. ¿Cómo carajo pueden esperar que alguien les respete, si no demuestran con hechos que están en esta lucha de verdad y no son capaces de continuar en una tarea que comenzaron ellos mismos? ¿Cómo pueden pensar que les van a apoyar, si están mostrando a las claras, que no son capaces de poner sus bolsillos a la altura de sus bocas, ni de alentar a los que se solidaricen con ellos, sin afanes protagónicos, sino con la firme convicción de que todos juntos tenemos que arrimar el hombro, para castigar cada ofensa, para frenar el avance de la quinta columna, para rescatar las calles para el exilio duro de verdad y dar la batalla hasta el final, sin abandonar un proyecto a mitad del camino, porque se impone un interregno de trabajo callado y fecundo?

Ya va siendo hora de que se demuestre con hechos que esto no es un juego, ni tarea de unas horas de preparación para lograr unos minutos de fama, sino que es una magna tarea, que requiere entereza, constancia, y sobre todo, mucho sacrificio personal y monetario. Que no basta con pedir a otros cooperación, porque es muy fácil repartir la ayuda que se recibe de otros, sino que tiene que dar uno mismo hasta donde duela; y sobre todo, que no se dejan las tareas inconclusas. ¡Que eso es lo que distingue a un líder de un demagogo!

En primer lugar, se debía de haber exigido a la Policía, presente cuando la agresión, la detención inmediata del agresor. Ese titubear no es de gente decidida y que están concientes de lo que se debe de hacer cuando se va a esos enfrentamientos, que lo menos que deben de tener los convocantes es una comisión de orden interno que esté preparada para actuar en estas contingencias.

Es una vergüenza para este exilio y sobre todo para los organizadores de la contramarcha y para quien recibió los vergonzantes bofetones (en la foto a la izquierda), que a estas horas, todavía todo esté en veremos y que no se haya hecho nada sonado para que las autoridades se ocupen de hacer su labor.

No basta con hacer la denuncia del caso, hay que presionar al oficial investigador y ayudarlo con pistas y presionar para que se interrogue a los patrocinadores de la marcha quintacolumnista. Mantener el "affair" vivo publicitariamente, ir a la Fiscalía y presionar para que se establezca el caso y se inicie una investigación y sobre todo, incentivar a personas que puedan conocer al tipejo, con una buena oferta monetaria, para que lo echen para "alante". Lo demás, es pura demagogia barata y conformismo indolente, que le regala el éxito al adversario.

 ¿Es así con esa indolencia como se lucha contra un enemigo tan dedicado y taimado? ¿Es acaso que se es tan iluso, que se pueda creer que con esa actitud se ganan batallas?

Por Dios, dejemos ya los jueguitos y entremos al terreno a jugar al duro y sin careta, y si no lo vamos a hacer, paremos la comedia de servirles de pala para que el contrario casi siempre salga victorioso. Que ya, el enemigo rompió la línea de contención y está en nuestro propio campo y si no damos la batalla de verdad aquí, debemos olvidarnos de pensar siquiera que podremos un día ir hacia el sur.

Limpiemos el camino de mojigatos y postalitas. Y quien se sienta ofendido por esto, que me lo demuestre haciendo de verdad y siguiendo las cosas hasta el final sin claudicaciones y conformismos suicidas.

No creo necesario aclarar que Aldo Rosado-Tuero no quiere liderar ninguna campaña, ni opacar a nadie, ni mucho menos manejar ni un centavo de ninguna campaña, sino ser un soldado más, pero en una lucha seria y sensata, pero por si las moscas lo dejo bien aclarado.