"LOS RESTOS DE ZAPATA LOS CREMARON EN EL CEMENTERIO DE GUANABACOA."- Israel Zapata.

miércoles, 22 de junio de 2011

"LOS RESTOS DE ZAPATA LOS CREMARON EN EL CEMENTERIO DE GUANABACOA."- Israel Zapata.
(6-21-11-5:05PM)
Por. Lic. Maria del Carmen Carro Gómez.  
Israel Zapata, lleva el dolor en sus ojos. Me detuve ante él y mi mirada se clavó en los ojos que me traían muchos recuerdos. Es la misma mirada de mi amigo muerto.  
_ ¿Dónde cremaron los restos de Zapata?- le pregunté a Israel, quien me responde.  
-A pesar de todos los esfuerzos que hizo la Seguridad del Estado porque no reconociéramos el lugar, yo identifiqué a Guanabacoa. Me dijeron que estábamos en el Cementerio de la Lisa. (Otro Municipio capitalino)  
Yo conozco Guanabacoa.-respondió enérgicamente a los gendarmes. Israel, se percató que trataban de confundirlo, pero él conoce la Villa y sus Cementerios.
Israel, es menor que Orlando, quien perdiera su vida en una ejemplar huelga de hambre en contra de los abusos en las cárceles de Castro. Él conoce al dedillo las acciones que llevó a cabo su hermano mayor y me dice:  
-Yo la reconocí a usted enseguida, yo la veía con mi hermano. El día 6 de diciembre del 2002 yo me presenté en la Unidad de la Policía de Acosta, donde tenían detenido a mi hermano junto a un grupo de opositores. A pesar, que las autoridades insistían que entregara la ropa de aseo que llevaba para mi hermano Orlando, me negué. Yo les exigí que me enseñaran la ropa de mi hermano. Yo sabía, con que ropa él “andaba”. –“Yo temía, que lo habían asesinado”.-“ No ocurrió en el 2002, pero si sucedió años después.”
(23 de febrero del 2010.)
Le comenté a Israel.-“La historia tiene caprichos” Guanabacoa, mi pueblo recibió al joven lleno de vida e inclaudicable. Zapata recorrió las calles de Guanabacoa, infinidad de veces. Yo le veía entrar a mi casa sudoroso. El transporte estaba en sus peores crisis en La Villa, y la mayoría de las veces había que realizar largas caminatas y uno de estos caminos que conducían a mi casa, es precisamente el de la llamada Carretera Vieja, donde está ubicado el Cementerio Nuevo (en la foto)y lugar donde cremaron los restos de nuestro hermano de lucha.
-Zapata entraba a Guanabacoa, en compañía de Enry Saumell, de Humberto Montoya y también en muchas ocasiones, acompañado del Delegado de la parte oriental del Movimiento 24 de febrero, Ramón Eireos.  
Le dije a Reyna, su madre en el homenaje que le rindieron a ella y su familia en la Casa del Preso, el pasado día 18 de junio.
-Yo, el Zapata que siempre llevo en mi corazón, es el joven de las “trencitas”. Ella, me sujetó de la mano y dijo, visiblemente emocionada. –“Ay, mi hijito, con sus trencitas”. Ella sabe que hablo del joven que se inició en la Oposición. Así, era Zapata, con unas trencitas. Así, caminaba conmigo por las calles de la Villa de Pepe Antonio.  
En las afueras de la Casa del Preso, Israel Zapata me reitera. “Ellos, refiriéndose a los de la Seguridad, no querían que reconociéramos el Cementerio de Guanabacoa.  
Yo voy más allá que el hermano de mi amigo ‘Héroe”. Ellos no querían que Guanabacoa, conociera, que allí estaba el Joven asesinado por “Los Castro”. Ellos saben que los hijos de la Villa, no toleraron el asesinato del Remolcador 13 de marzo. Ellos temieron al Zapata Vivo. Y sienten TERROR del Zapata que dejó un ejemplo contra la injusticia.
La historia les jugó una mala pasada a los gendarmes. El único Crematorio (en la foto)que está brindando estos servicios, está ubicado en ese pueblo que recibió al joven invencible, y se quedo impregnado de su rebeldía, con sus cenizas.  
Israel Zapata tiene razón. “Temían”.- Los querían confundir. Los ojos del hermano de Orlando Zapata están tristes, pero también llenos de indignación. Y esa indignación de seguro se convertirá en REDENCIÓN.