El bueno de Pánfilo, la hambrienta de dólares y el sediento de “rating”

El bueno de Pánfilo, la hambrienta de dólares y el sediento de “rating”. 

¿Dónde se encuentra Pánfilo ahora? Nadie lo sabe. Desapareció al día siguiente de que un canal de televisión de Miami  mostrara un video, tomado en Cuba por una mujer que viajó a la isla con el solo propósito de emborrachar a Pánfilo y darle pie para que le mentara la madre a Fidel Castro y llamara marica a su hermano Raúl. 

Por Antonio J. Fernández 

No he leído en la prensa de Miami ni un solo artículo que criticara esta deleznable acción. La mujer, llamada “Olga” (aunque tengo la seguridad que el nombre es ficticio) vio la oportunidad de ganarse unos miles de dólares yendo a Cuba, encontrando a Pánfilo, pagándole una borrachera, haciéndole preguntas para motivarlo y filmando con su cámara las respuestas que bien sabía ella que lo iban a llevar de nuevo a la cárcel o quizás a la muerte, como aquellas que “Fidel Castro era un H.P.” y “Raúl Castro un homosexual”. 

En el video se vio perfectamente que Pánfilo no quería hablar del asunto ni contestar sus preguntas, pero los tragos de “ron peleón” que “Olga” ponía ante sus narices fueron rompiendo su silencio y ecuanimidad hasta que, súbitamente, se “botó para la calle” y explotó con una descarga de improperios e insultos contra la dictadura comunista y los hermanos Castro, que por muchísimo menos que lo que dijo Pánfilo han enviado a cientos de cubanos al paredón. 

Todo salió como “Olga” lo había planeado. Regresó a Estados Unidos y comenzó a recorrer las distintas estaciones de televisión hispana, mostrándoles el video y buscando al mejor postor. Me imagino que fue rechazada por casi todas ellas, no sólo por el vocabulario sino porque hasta el más estúpido sabía que tan pronto saliera al aire en Miami no se iba a demorar ni un minuto la detención de Pánfilo. Y esta vez para siempre. 

Pero siempre hay excepciones en la regla. Y en este asunto la excepción fue AMÉRICA TV y quien lo presentó, OSCAR HAZA, el conductor del programa “A Mano Limpia”. Y compraron el video a la mercenaria “Olga” por unos cuantos miles de dólares con la condición de que no podían mencionar su nombre.  

Y la tal “Olga” satisfizo su hambre de dólares y al irresponsable de Oscar Haza le importó “tres pepinos” la suerte que iba a correr el infeliz alcohólico Pánfilo, porque a él lo que le importaba era saciar su sed de “rating”, aunque sólo fuera un punto. ¿Sabían ellos que el que iba a pagar las consecuencias era el propio Pánfilo y no “Olga”, ni América TV, ni el desvergonzado de Oscar Haza? Por supuesto que sí lo sabían y no les importó ni un pepino. Como decía un viejo anuncio de la radio y televisión: “¡Aquí lo que importa es el CASH!”. 

Ruego a los lectores que si alguno sabe el verdadero nombre y la dirección de “Olga” que haga el favor de enviarlos a mi nombre en “Nuevo Acción”, para  publicarlos y que todo Miami sepa quien es esa infame que vendió, por unos miles de dólares, la libertad o quizás la vida de Pánfilo. 

Y a ti, Oscar Haza, si conocieras el valor de una afrenta, ¡te escupiría el rostro!